De los griegos a los coreanos: la industria de los semiconductores en Corea del Sur
Por Eduardo Luciano Tadeo Hernández y María Carolina Castro Quevedo[1]
Historia electrizante
La electricidad es un fenómeno tan cotidiano en el siglo XXI, que a los ojos del usuario resulta poco asombroso el encender un foco, usar un horno de microondas o cargar un celular. Pero, este fascinante fenómeno ha cambiado el rumbo de la historia, las ideas de la humanidad y con ello el desarrollo de las economías.
La historia inicia con los griegos. Tales de Mileto, uno de los siete sabios, llevó su espíritu curioso e inteligente a descubrir que al frotar el ámbar con una pieza de lana atraía pequeños objetos. Sin embargo, fue hasta el siglo XVII, cuando el inglés William Gilbert retomaría los estudios gregorianos para averiguar que no sólo el ámbar tenía esta propiedad. William utilizo entonces la palabra elektron -ámbar en griego- para definir la propiedad de los cuerpos denominada electricidad.
La historia de los semiconductores –conductores o aislantes dependiendo de la temperatura- inicia en el siglo XIX, contribuyendo de manera importante en la historia general de la electricidad. Los descubrimientos de E.E. Hall, J.J. Thompson, P.Drude, F. Bloch, entre muchos otros, fueron esenciales para los experimentos que llevarían a Bardeen, Brattain y Shockley, en la primera mitad del siglo XX, a desarrollar el primer transistor, gran inicio en el proyecto de elaboración de dispositivos semiconductores. Para el siglo XXI, el ímpetu por la modernidad y la industrialización despertó el interés por desarrollar la industria de los semiconductores. Corea del Sur, en su proceso de desarrollo, apostó a este sector.
Los por qués y los cómos de los semiconductores en Corea
Derivado de la evolución histórica de la economía, la política y la ciencia, los estados se han dedicado a implementar diversas estrategias para impulsar su desarrollo económico. En el caso de Corea del Sur, la industria de los semiconductores ha sido relevante para su economía, en donde desde el siglo XX y hasta la fecha, la inversión extranjera juega un rol preponderante.
En los últimos 50 años, Corea ha demostrado una gran capacidad de desarrollo económico, posicionándose como la doceava economía a nivel mundial. Dentro de la economía surcoreana, la industria de los semiconductores, los cuales son clave para la vida diaria, ha ganado espacios importantes dentro del país y en el exterior. La clave ha sido la diversificación de productos y mercados de las empresas coreanas.
El surgimiento de la industria de los semiconductores en Corea del Sur se remonta a los años sesenta, gracias a la inversión extranjera de empresas estadounidenses como Fairchild y Motorola. En esta época, el rendimiento de la industria de los semiconductores fue promovido por tales empresas y así fue incrementándose considerablemente. También las empresas japonesas, que apoyaron varios proyectos de desarrollo en la parte sur de la península coreana, decidieron invertir en el sector. El contacto internacional junto con la capacidad doméstica de planificación fueron elementos claves para el éxito de la industria.
Hacia la década de los setenta, el interés por la industria de los semiconductores, junto con otro tipo de industrias que requerían de gran inversión de capital económico y humano, se acrecentó en el gobierno surcoreano, quien observó que la exportación de estos productos seria clave para la expansión y fortalecimiento de la economía coreana. Inició, entonces, la implementación de políticas tales como el plan sexenal de sustitución de importaciones de seis componentes electrónicos, lo cual promovió el rápido desarrollo de la industria. Asimismo, dentro de sus acciones de impulso a las empresas nacionales, el gobierno de Park Chung-hee otorgó créditos a las empresas de semiconductores para su promoción y crecimiento. En 1974, surge la compañía Korea Semiconductor Inc (KSI), la cual, años después, se renombraría Samsung Semiconductor Inc.
Semiconductores coreanos en el mundo
En la década de los ochenta, la industria de los semiconductores en Corea del Sur logró abrirse al mercado internacional, para eventualmente competir con las industrias estadounidense y japonesa. En el 2013, el país ocupó el segundo lugar dentro de los países manufactureros de semiconductores, tan sólo por detrás de los Estados Unidos. Además, dentro del top 10 de los proveedores globales de semiconductores, dos empresas coreanas salieron a relucir: Samsung, produciendo 1867 millones de semiconductores al mes, y SK Hynix, produciendo1035 millones de piezas mensualmente.
Las empresas coreanas son hoy proveedoras de productos con tecnología avanzada, especialmente de memorias semiconductoras de tipo DRAM y NAND. Las nuevas dinámicas exigentes del mercado han provocado que el desarrollo de tecnología en Corea del Sur acompañe el ímpetu por mantener un desarrollo económico que refleje una sociedad del conocimiento.
Actualmente, la industria de los semiconductores en Corea representa a más de 300 compañías, nacionales y extranjeras, distribuidas en pequeñas, medianas y grandes empresas que participan en la producción de materiales, dispositivos, equipo y diseño de los semiconductores. En 2013, las exportaciones de semiconductores le ganaron el primer lugar a nivel mundial, representando 57 mil millones de dólares. Éste es el resultado económico del perfeccionamiento coreano de un descubrimiento griego. La tecnología también tiene historia y la economía puede reflexionarse a partir de esta.
[1] Carolina es estudiante de la carrera de Relaciones Internacionales en la UPAEP.