Vinos y licores hispanos en Corea: evolución gustativa
“Desde 2013 Corea del Sur ocupa el décimo lugar de los destinos más importantes para exportación de vino chileno”.
Por Montserrat Piñeiro
Las nuevas generaciones de coreanos no dejan de amar el soju y el makgeoli. Aunque afortunadamente existen, en tierras del kimchi, muchísimos licores que se elaboran aún en casa de forma rústica y que tienen propiedades medicinales. Gracias a las cada vez más frecuentes mezclas raciales, migraciones e intercambios culturales ya sea por estudios o negocios, los coreanos se han abierto al tema de licores y sobre todo a los vinos. Ahora vistamos un supermercado y hay una vasta sección dedicada los caldos y espirituosos. De Francia, Italia, Sudáfrica y Australia podemos elegir buenos vinos, a precio mucho más alto que en occidente y asesorados por una buena sommelier, sí, una mujer como sommelier en los supermercados de Corea. Un aplauso a todas esas profesionales que eligieron el vino como su forma de vida y a todos aquellos gerentes y directivos que les dan la oportunidad de compartir sus conocimientos.
Los chilenos son los vinos que brillan por cada rincón del área de vinos: al frente, en los especiales y en los estantes, y es que la situación de los caldos de aquel país en Corea es algo para analizar, veamos.
Vinos chilenos
Pues sí, Chile compite de forma cerrada con europeos y norteamericanos en Corea del sur en lo referente al sector vinícola, gracias al acuerdo de libre comercio que existe entre Corea y Chile, el país andino se proyecta certeramente como el mayor vendedor de caldos por volumen en la península en los próximos diez años. Sin duda los acuerdos comerciales son una plataforma para exportadores que pretenden posicionarse en mercados extranjeros y esto se comprueba con el cuadro vinícola que observamos de este lado del mundo.
Impuestos de dos dígitos y aranceles deben ser pagados por todo producto importado que no esté comprendido dentro de un tratado de libre comercio, por lo que vinos europeos y americanos se ven desfavorecidos frente a las etiquetas del país sudamericano.
De hecho, desde 2013 Corea del Sur ocupa el décimo lugar de los destinos más importantes para exportación de vino chileno, pero eso sí, con los mejores precios de venta, -en cuanto a beneficio-, en el mercado.
Ciertamente los chilenos muestran una excelente calidad que en contraste con los caldos italianos y galos, cuya relación calidad-precio está bastante desequilibrada debido básicamente a la fama, ofrece al consumidor simplemente contundencia, certeza y excelente resultado en pruebas sensoriales por lo que los conocedores optan tanto en restaurantes, hoteles y tiendas, por vinos de un extremo del continente americano. Todo ello reconocible por todo comensal y aficionado, por ejemplo en las recepciones de los hoteles de lujo que se engalanan con etiquetas que ostentan nombres en lengua castellana, detalle que a los hispanoparlantes no se nos escapa y reconocemos de inmediato.
Vinos españoles
Lo nuevos vinos ibéricos aún no causan furor por aquí pero los Rioja y Ribera del Duero son constantes como en el resto del mundo. Relativamente fáciles de beber, no para paladares demasiado rebuscados (no son altos en taninos, ni con acidez muy marcada), y con buena relación precio-calidad, que fue justo lo que les abrió las puertas mundiales.
En los dos primeros trimestres del 2013 las exportaciones de caldos ibéricos se dispararon en 39,4%, un excelente indicador que tal vez ayude a España a avanzar algunos escalones dentro de los primeros cinco puestos de ventas en Corea. En 2012 España ocupaba el quinto lugar en esta tabla y tal vez para el cierre del 2013 (escribimos este artículo a mediados de diciembre de 2013) desbanque a los Estados Unidos.
La vitivinicultura española conserva dos facetas, aquella que se apega a lo tradicional y que ha tenido un éxito sostenido durante varias décadas y la nueva ola de vanguardia que va de la mano de su cocina. Con los vinos y las vides se experimenta, se crea y se descubren nuevos matices. Sin duda en unos años más los comensales coreanos estarán listos para maridar bombones y pasteles de chocolate con vinos tan ricos y sofisticados como los catalanes Buil & Giné y Giné Giné, -y esto no es un anuncio comercial sino el simple comentario de una buena experiencia de maridaje que tan nos enamoró el paladar que nos vemos obligados a mencionarlo-.
Mexicanos y argentinos
Por su parte, Argentina tuvo un gran avance al lograr la eliminación de las medidas restrictivas con respecto a la certificación de ausencia de natamicina (un antibiótico usado en la industria alimenticia) que les exigía Corea del Sur. Se reducen costos, se agilizan procesos y los exportadores están listos para arrancar de nuevo en posicionamiento y negociaciones.
No será fácil con los competidores que tienen pero seguramente lograrán abrirse paso entre los amantes de la bebida de Baco.
México aún lucha contra esos aranceles que obstaculizan fuertemente el comercio a precios asequibles y muchos coreanos no saben ni siquiera que la tierra de Quetzalcóatl produce excelentes vinos que han sido acreedores a medallas de oro y plata en concursos internacionales organizados en Italia y Bélgica. Adicionalmente al desconocimiento de los consumidores potenciales, los precios de los caldos mexicanos tendrían que afrontar a productos como los chilenos y españoles que por volumen de producción llevan la delantera en costos.
El tequila
Tal vez de los licores latinoamericanos el más mediatizado es el tequila y es por ello que le brindamos un breve espacio en nuestro texto.
El tequila tienen un alto porcentaje de alcohol y por ello gusta a los coreanos, al beberlo solo su sabor es penetrante y eso gusta al paladar coreano, además de toda la mercadotecnia que lleva detrás. Actualmente ningún bar del barrio de Itaewon prescinde de él y se encuentra presente en cocteles, bebidas o derecho.
Lo que hace falta en el mercado coreano es una mayor oferta de marcas y una amplísima explicación sobre las diferencias existentes entre blanco, añejo y reposado, también los matices que ofrece el destilado; las mejores formas de mezclarlo y el saber cómo seleccionarlo. Con la organización de conferencias, muestras, degustaciones y talleres muchas cosas pueden lograrse.
¿Y el pisco, el jerez y la manzanilla?
Sin duda el pisco, esa bebida que es causa de disputa por su origen entre Perú y Chile, les gustaría mucho a los bebedores coreanos por su gran contenido de alcohol, bastaría con que lo conozcan bien para adoptarlo como un buen licor invitado a sus mesas en reuniones de negocios y amigos. La bebida está ganando adeptos en el mundo y aunque tal vez tarde en dar paso firme en Corea, puede suceder.
En lo que respecta al jerez y a la manzanilla, el mejor camino es a través de los restaurantes españoles y tal vez las damas sean más fáciles de atrapar ya que los caballeros muchas veces se quedan con la cerveza como aperitivo.
La imposición de una moda en la que para abrir boca se beba una manzanilla muy fresca o un jerez, sería fantástica. Durante el verano las bebidas podrían hacer las delicias de las damas amantes del buen vivir y en los hoteles de lujo o en barrios como Apujeong y Gangnam. Mientras tanto estas bebidas aún están al acecho de los comensales coreanos.
Por cierto, pasémonos por COEX en el mes de noviembre del presente año, precisamente entre el día 12 y el 15, para curiosear lo que se ofrece en el nuevo pabellón que está destinado a caldos y espirituosos.
Es altamente recomendable para las oficinas comerciales de las embajadas.